Tener y mantener

Por Alicia Vesperinas

Presidente CChC Osorno

Publicada el 14 de septiembre en el Diario Austral Osorno

Cuentan los mayores que antiguamente, era tradición en fiestas patrias pintar la casa y estrenar una pinta nueva. Era la manera en que con la llegada de la primavera, se renovaba la imagen y se aprestaba el ánimo para celebrar el feriado dieciochero.

Linda y muy necesaria costumbre es aquella de mantener el buen estado de la casa. Una vivienda es el activo más importante del que dispone la familia chilena. Como toda inversión, es menester cuidarla para que no se deteriore y mantenga su valor.

Si bien es cierto, el artículo 18 de la Ley General de Urbanismo y Construcciones establece responsabilidades que van desde tres a diez años por defectos de construcción imputables al primer vendedor, ésta garantía no aplica por desperfectos que derivan del uso inadecuado o falta de mantenimiento del inmueble.

Muchas son las acciones que pueden emprenderse. La Cámara Chilena de la Construcción elaboró un manual de uso y mantención de la vivienda, disponible en forma gratuita vía web. En él, se establecen una serie de medidas preventivas de mantención, reparación y reposición que asegurarán la prolongación de la vida útil y evitará daños que podrían ser de más costosa reparación.

En esta zona debe ponerse atención en evitar la humedad al interior de recintos. La humedad del aire se transforma en agua en contacto con superficies frías. La condensación tiene, en general, consecuencias graves, ya que mancha y suelta las pinturas, daña los papeles murales y favorece la formación de zonas con hongos que pueden incluso ser dañinos para la salud. Calefaccionar y ventilar en forma controlada, evitarán este inconveniente.

Dado el largo feriado que tendremos, podríamos dedicar un tiempo a revisar el estado de canaletas y bajadas de aguas-lluvia. O cambiar sellos de puertas y ventanas, limpiar filtros de campanas de cocina y rejillas de ventilación. No está demás revisar válvulas y grifería que puedan tener filtraciones, con la consiguiente pérdida de agua. Los más avezados pueden inspeccionar las techumbres, cambiar planchas en mal estado y afianzar las sueltas, siempre respetando las indicaciones de seguridad.  

Tan importante como tener la casa propia es mantenerla para que la alegría del estreno perdure a través de los años.