El fairplay

Por Alicia Vesperinas

Presidente CChC Osorno

Publicada el 17 de agosto en el Diario Austral Osorno

¿Se imagina usted como sería un partido de fútbol donde los equipos pudiesen jugar libremente, sin vigilancia alguna y sin nadie que detenga el juego si alguien queda off-side o comete una falta? Lo más probable es que se transforme al poco andar en una batalla campal. Es el árbitro la figura que vela porque las reglas se cumplan y tiene la facultad de sancionar e incluso expulsar a quien no se comporte de acuerdo con el reglamento.

En nuestra sociedad una importante labor fiscalizadora la ejercen las Superintendencias, existen actualmente diez, que vigilan actividades económicas tan relevantes y diversas como los Casinos de Juego y las Pensiones. Son organismos autónomos y pueden dictar normas que son obligatorias para sus ámbitos de control.

Dentro de los antecedentes que se conocieron en el marco de la emergencia del agua está un informe de auditoría efectuado a las plantas productoras de agua de Osorno, en octubre de 2018, solicitado por la Superintendencia de Servicios Sanitarios. Este daba cuenta del alto riesgo operacional que presentaba la captación de Caipulli y de la necesidad de inversiones para recuperar su deteriorada infraestructura. Cabe entonces preguntarse ¿Por qué se le permitió operar en condiciones de riesgo a sabiendas de que provee más del 60% del agua de la ciudad? ¿Carece de atribuciones la Superintendencia?

En otro ámbito, hace menos de un mes volcó un bus dejando 6 personas fallecidas. Mediante un simple chequeo de la patente se pudo constatar que circulaba con placas adulteradas y que al parecer era una práctica habitual de la empresa. Misma cosa con el exceso de velocidad, es común ser adelantados por raudas máquinas que ponen en riesgo la seguridad de sus pasajeros, que incluso viajan de pie en el pasillo. ¿Nadie sabe de estas prácticas? ¿Existe fiscalización en terminales de buses y carreteras? ¿Por qué se sigue haciendo a vista y paciencia de todos?

En otro orden de cosas, los días de emergencia ambiental existe la prohibición de emitir humos visibles en ciertas horas del día. Basta un breve paseo por la ciudad para constatar que la medida no se acata. ¿Será porque se percibe la ausencia de sanción?

Como sea, ojalá llegue el día en que no sean necesarios los organismos que vigilan nuestra conducta, mientras tanto sería bueno preguntarnos qué sucede con quienes tienen por misión asegurar el juego en regla, para que sin excusa puedan mostrar la tarjeta roja y queden en la cancha solos quienes acatan el fair play.